Incondicional

*Foto de mi archivo personal

Me senté en el parque, en la misma banca de siempre, llevaba tiempo sin hacerlo, un poco de nostalgia me llenó, sentía como alguien me observaba, yo escribía y recitaba, hablaba solo, dirían otros.

Ella, la mujer que me observaba, se acercó, se sentó a mi lado. Era hermosa, cabello corto, pañoleta verde que lo ataba y lo rodeaba, una camiseta del mismo color de la pañoleta y un jean.

-Hola- Dijo.

-Hola, ¿Cómo estás?- pregunté.

-Muy bien.

-Mucho gusto, JuanSe- dije.

-Mucho gusto, Uvita, ¿a qué te dedicas que te veo hablando solo?- Preguntó.

-Soy escritor, soy poeta, soy tan rutinario como el amor y tan eterno como una canción grabada en un Cd.

Ella sonrió.

-O sea que sos poeta.

-Si, ya te lo dije.

-¿Y podés hacerme unos versos?

-¿Ya?- pregunté.

-Si- respondió ella.

-Está bien, dame un segundo. Eres tan bella como un rojo atardecer en las playas del atlantico, tan dulce como un beso en el mar mas profundo, tan perfecta como una escultura expuesta en un museo, tan inalcanzable como las estrellas en el cielo.

Alejo se sentó a mi lado, traía dos coca colas, una para él y la otra para mi, me vio hablando con ella y sus ojos se llenaron de tristeza.

-JuanSe, es hora de volver.- me dijo.

-¿Volver? ¿A dónde?- pregunté.

-Al hospital mental.

-¿Dónde es eso?

-Donde vives.

-Y ella ¿puede acompañarnos?

-No.

-¿Por qué?

-JuanSe, ella no existe, es una alucinación.

-¡O sea que según vos yo estoy loco!

La voz se le quebró.

-Parce,-dijo- sinceramente me duele verte asi, pero lo cierto es que has perdido la razón y vos te sentaste en esa banca mientras yo compraba las coca colas, cuando volví estabas hablando solo, hoy salimos a caminar al parque para que tomaras aire nada más.

-Pero si ella se acercó es porque le gusto, le parezco interesante.- le dije.

-JuanSe, ella no existe. 

Me enojé y con rabia me marché, lo dejé ahí solo en el parque, Uvita me alcanzó, me tomó la mano y se quedó a vivir conmigo.

11 comentarios

  1. Muy buena pero barrisima..no quiero ver esa tristeza en la cara del bajo!..no la quiero ver en ninguno de nostros!!mmm mil textos despues…pero que no te comente no significa que no te lea…ni que no te quiera…

  2. a parce q lindo…. a la irrealidad no existe y en este mundo lo normal es lo mas anormal…. quedate con tu mundo mentras podas sostenerlo

  3. aaa ajajaj….excelente…sos dueño de tu propia realidad……ajj….preciso y publicas justo cuando mas tengo ke estudiar…pero no importa…en verdad vale la pena…gastarle un tiempito a estos escritos…ya espero ansioso la proxima publicasion….estas ganando buenos lectores….mucha suerte pues!! hasta la proxima…J.E

  4. Ella fue al parque porque sabía que vos estabas…(me dijiste ésto no hace mucho,te acordás?)Ganial, Juanse, y que los «locos» son los otrooooooooosssssssss!!!!!!!!!!Mil besos desde la más sana locura!

  5. aaayyy! Juanse, todo es como tan bonito, pero llega la tristeza de tu amigo y vos totalmente convencido de que Uvita es real!!!… Aaayyy no que triste!!!… Pero como siempre me encantan tus historias!!!

  6. Buena historia, claramente los síntomas llegan a llenar un espacio demasiado angustiante como para ser aceptado. Para el personaje, como para muchos, es más sano alucinar, «ser loco», que vivir con la tremenda angustia que significaría aceptarse.Saludos!

  7. Me encantó este relato lleno de magia y con una metáfora interesante.La foto acompaña muy bien, transmite mucha serenidad.Besito

  8. Genial!!! ke grata sorpresa me he llevado hoy!!… desde hace mucho tiempo tenia ansias de ver nuevamente!! este singular escrito!! el cual me recuerda!! a veces es mejor una estupenda locura!!.. ke la mas absurda y aburrida normalidad!! pues la imaginación debería siempre trascender y a vivar elocuentemente cualkier realidad!!… contento he kedado la noche de hoy 🙂

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *