Ella estaba sentada a mi lado, había llegado para que le ayudara a diseñar un logotipo para su marca de jeans. Yo la miraba, era bonita, su cabello negro caía un poco más abajo de los hombros, sus ojos de un color como verdoso me miraban a mi y luego se desviaban hacia la pantalla del computador mientras yo le explicaba cual era el significado de lo que había hecho. Ella sonreía y asentía con la cabeza. Algo pasó, la miré a los ojos y me dieron ganas de ella, ella me miró y se asustó.
-Tranquilízate- le dije.
Bajé por un par de refrescos para los dos y un pañuelo. Le di su refresco, el calor estaba tremendo, debía aprovechar además que mis padres se encontraban en la finca disfrutando de un caluroso fin de semana, así que era mejor actuar en este instante.
Apenas terminó su refresco, la empecé a abrazar, ella accedió, la cubrí con mis brazos, fui subiendo mis manos hasta posar el pañuelo en su nariz, la dormí en mis brazos, le quité la ropa, le dejé en ropa interior y la amarré de la viga del techo de mi habitación, los pies también se los enlacé. Así no podría moverse cuando despertara, organicé todo y esperé sentado a que volviera en sí.
-¿Dónde estoy?- preguntó una hora después, aun dormida.
-Sigues en mi casa- le respondí.
Se relajó y volvió a dormir. Yo la miré, su cara perfecta, su cuerpo esbelto, su sonrisa blanquísima, la cabeza le pesaba. Tomé el cautín y empecé a presionarlo contra sus uñas de los pies, vi como la primera se derritió llegué a la piel, ella gritó de dolor, ya despertó, seguí así una a una se iban derritiendo, hasta que tocaba la piel y veía como salía la sangre de sus dedos, ella seguía gritando. Empecé a subir el cautín por sus piernas, la iba marcando de a poco, hacía una presión leve, que no lastimara mucho, simplemente la quemara y le hiciera unas cuantas rayas en la piel, llegué a su cintura y luego volví a bajar.
-Si me vas a violar, hacelo rápido que no quiero sufrir- gritó.
-Yo no sería capaz de violar a nadie nena, así que ahí si discúlpame- respondí enojado.
Solté el cautín y tomé un cuchillo, empecé a hacer pequeños cortes en su abdomen, un abdomen perfecto, con una curvatura hermosa y un ombligo muy bonito, la hoja del cuchillo iba rasgando suavemente su piel cuidada por aceites y cremas humectantes, sus gritos aturdían mis oídos.
-Me estás dañando el cuerpo, maldito, voy a llamar a la policía, te juro que la voy a llamar- gritó nuevamente.
Tomé el teléfono en mis manos y lo puse ante sus pies.
-Hazlo, llama a la policía.-le dije
Ella lloró,-Maldito cínico- gritó- no quiero ver como acabas con mi cuerpo, viólame rápido para acabar con esta pesadilla-
-Ya te dije que no te voy a violar y si no quieres ver, pues te tengo una solución- le dije.
-Dale, con tal de no ver esto que estás haciendo, lo que sea-
Tomé nuevamente el cautín y lo introduje en sus ojos, gritó a más no poder, entró en shock y se desmayó. Yo tomé mi refresco, prendí una vara de sándalo para ahuyentar el olor a sangre, abrí la ventana y me senté a seguir trabajando.
Una hora después ella volvió otra vez del shock.
-¿Dónde estoy?- preguntó.
-Sigues acá- le respondí.
-Maldita sea, esperaba que fuera un sueño.- gritó- ¿y no has sido capaz de violarme?
-Ya te dije que no te quiero violar.
-Entonces hacé lo que vas a hacer ya.
Volví a tomar el cautín y empecé a recorrerle el abdomen, ella seguía gritando, hice unas cuantas líneas en su busto, luego lo solté y tomé el cuchillo. Cogí impulso, tiré mi brazo hacia atrás, hice el calculo de en qué parte debía poner la primera puñalada y… Desperté gritando.
Que historia tan estremecedora.
uyyy marik esta excelente!!!q originalidadfelicitaciones mijo
Ahhhhhhhh pero que bien mantuviste el suspenso hasta el final. Felicitaciones, excelente relato, muy bien llevado.Beso grande.;-)
Ayyyyyyyyyyyy Juanseeeeeeeeeeeeeee!!!!!!!!!!!(esos sueños tenés???)Muy bueno!!!!!!!Mil besos!
:(Está genial… ´Pero… es inevitable estremecerme cuando lo leo!!!Demasiado teso JuanSe…Lo lamento mucho.Vos me entendés, ¿cierto?
Cada vez escribes mejor Juanse.Un beso enorme!
Que es la felicidad para vos?, la felicidad es un papel, eso es la felicidad?. No!, estas equivocado. La felicidad es esto, poder transmitirle a los demás lo que pasa por nuestras cabezas, lo que pensamos cada uno de nosotros, es nuestra libertad, es poder expresar lo que realmente sentimos, los sentimientos personales, NUESTRAS IDEAS. De que cada uno sepa lo que piensa el otro, que no hallan barreras para hablar, porque las ideas de cada uno, es la espada mas filosa que pueda existir, la mejor defensa que cada uno tiene, y por mas que la sociedad nos haga callar, hay que hablar igual, porque de las cientas personas que nos callan, solo una lo podrá entender, pero esa persona, en su momento se lo va a transmitir a otros, y eso es lo mas lindo que existe, la mayor felicidad.Creo que vos tambien podes pensar igual que nosotros, te esperamos en nuestro blog.Tu opinion nos interesa :)Suerte !
Tenia miedo , casi me pongo a llorar por la chica :[ ajaja esta muy muy bueno . Te felicito me encantó.
Hey…que calidad de cuento, en realidad es un estilo que me gusta…date una pasadita por mi blog y pillás mis cosas, recibo críticas de toda clase…
Lo siento pero no me gustan este tipo de historias, me resultan demasiado desagradables incluso para ser un sueño o un juego. Pero reconozco que está muy bien escrita.Un beso y por favor sueña con angelitos, jaja.
Si es un sueño, que estremecedor y "vanguardista"…La imagen en comienzos es casi risible, pero a medida que la historia avanza; bueno nada.Te felicitoCuídate, un abrazo
“Las cosas que sueñas” sería un gran interrogante, pero cuando lo terminé me puse a pensar en la gravedad psicológica que sabes aplicar a los texto. Me introduzco en el personaje, y he sentido la gran armonía de quemar, diseñar a la mujer con un inerte cautín… Debo decir también de que soy muy bueno haciéndolo. Ajajá…Cuídate muy buen escrito. Felicitaciones.Abrazos.