Carta a mamá

Querida mamá.

Hoy en tú día, papá y yo, acompañados de mi hermana, que aunque aun no entiende las cosas estuvo ahí, decidimos realizarte una celebración. Fue sin regalos, fue sin sorpresas, fue sin ti, pero dedicada a ti. Cantamos tus canciones favoritas, bailamos así como me habías enseñado y comimos esas alitas picantes que siempre te encantaron con ensalada de lechuga, maicitos y mango.

Me peiné la cresta como siempre y en un instante, me senté a conversar con papá, sobre esa vez cuando siendo una golondrina joven se enamoró de esa panda de la cual nunca se olvidó y con quien últimamente ha compartido de esos días bonitos de su vida. Porque yo también he disfrutado esos días, esos en los que volviste, te acostaste conmigo en la cama y jugaste, me hiciste bailar nuevamente para que mostrara cuanto había progresado desde la ultima vez que viniste.

Me gustaría mucho saber cuando será la próxima vez que vuelves, pues ya me haces falta y quisiera que la familia se volviera a reunir más seguido, porque mi hermana llora mucho y dice extrañarte, yo también te extraño, pero ya soy grande y ella si me ve fuertecito no llorará más. Quiero volver a bailar a mirar para el techo cuando me digas y sobre todo quiero ver que papá ya no se preocupa tanto por nosotros, porque tu le ayudas a cuidarnos.

Igual, sin importar nada de lo que diga, quiero decirte que te quiero mamá, que eres la mejor mamá del planeta y que ante todo te desearé el día de la madre todos los días de mi vida.

Triguisar.