Defensa Propia


*Basado en la canción: Fuego y Miedo de Ska-P Album: Lagrimas y Gozos (2008)

Había crecido viendo películas de Clint Eastwood y Paul Newman, donde primaban los Smith and Wesson, los cargadores vaciados en cuerpos de vaqueros malos y los caballos. Su padre era su ídolo, más que los actores antes descritos, pero quien lo impulsaba a seguir adelante. Tenía nueve años y le veía como ese superhéroe que todo nos soluciona, todo nos salva.

Siempre quiso ser como Clint o Paul, tener el control de un arma y acabar con los malos, llegaba del colegio y prendía el televisor, reproducía el mismo DVD todos los días, tomaba el palo de la escoba y suponía que era su caballo, tomaba un par de cucharas y suponía que eran sus pistolas, las ponía en su cinturón y quedaba listo para la acción, las almohadas le servían de montañas, el perchero de casa podía hacer de cactus y mamá, mamá era esa amada mujer que siempre lo esperaba en el salón, sentada en la barra de casa que podía asemejar la del salón de la película y con un vaso de leche que para él era el más fino coñac.

Vivía en Pensilvania, pero papá que era un gran empresario de la ciudad había sido ascendido hacía unos días y sería trasladado a Texas. ¿Texas? Wow, su sueño hecho realidad, desierto, caballos, salones, vaqueros, sería ahora sí, como Clint o como Paul. Feliz por este traslado, empacó todo, hasta la foto de ambos que siempre ha cuidado como a su vida.

Llegó y se instaló, ya la empresa de papá le había inscrito en la mejor escuela de la ciudad, él se llevó una gran decepción, ni vaqueros, ni salones, ni desierto, nada, estaba en Houston y parecía una ciudad igual o hasta peor que las de Pensilvania, tenía nueve años y su sueño se había frustrado al conocer Texas y ver que no era como en las peliculas.

Entró al colegio, nuevo modelo educativo, nuevos compañeros, nuevos profesores, sonreía a todo el mundo, pero era visto por sus compañeros como el niño nuevo, de hecho lo trataban mal, el primera día, llegó con un ojo inflamado a casa, mamá preocupada le hizo curación y le explicó que iba a ser difícil adaptarse, que esperara y que además denunciara estos maltratos ante los profesores y coordinadores. Él aceptó, pero cada día llegaba con un moretón nuevo causado por sus compañeros de curso.

Papá enojado fue al colegio y habló con los profesores, quienes le informaron su desconocimiento sobre el problema, pero se comprometieron a estar pendientes del chico, además de esto, papá le dijo que no se fuera a dejar de nadie, que se defendiera, el chico sin saber que hacer, dijo que eran muchos y el papá le dijo que así sería más hombre entonces, enfrentándose a todos y dándoles su merecido.

Los días pasaban, ya iban tres meses y nada cambiaba, era golpeado a diario, moretones adornaban su cuerpo y sus ídolos no podían ayudarle.

Un día, después de mucho pensar y pensar, se dio cuenta que sus héroes no podían ayudarlo y que por esto se tendría que convertir él mismo en uno de ellos. Recordó que papá tenía una pistola nueve milímetros, aprendió a cargarla en Internet y salió para el colegio, lleno de ira, con ganas de acabar con los malos, llegó y los chicos que siempre lo golpeaban lo estaban esperando, él lleno de odio, los miró a los ojos, desenfundó el arma que llevaba en su cinturón y empezó a disparar, descargó el proveedor, veinticuatro balas, igual que la cantidad de niños que cayeron en sus manos. Se sintió como Clint, como Paul, cuando acababan con el mal, tomó la leche que venía en el almuerzo y se tomó dos tragos profundos que le supieron amargos como los tragos de coñac que ellos tomaban, se había convertido él mismo en su heroe.

10 comentarios

  1. Hey Juanse…muy bacana esta historia…la canción de Ska-p me gusta mucho y me estremece esa alienación que hacen los medios con tanta cosa que pasan…

  2. Después dicen que algunas películas, ciertos video juegos y los padres que descuidan a sus hijos en internet no influyen en estas situaciones.¿Sabés qué Juanse? Siempre me gusta leerte, pero la reflexión de esta entrada que se asemeja a un ensayo por lo profunda, me gustó muchísimo.Te dejo un beso grande y todo mi cariño.:-)

  3. Fuertísimo.Al Igual hay cosas que la justicia no podría jamás nunca entender.Como también hay cosas que nosotros no podemos entender de la misma justicia.Genial tu escrito Juanse… Abrazos

  4. Wow, ¡qué fuerte!Pero me gustó, no lo niego. Cuántas veces uno mezcla la triste realidad con la mágica fantasía. Deseando ser el héroe de la historia, el príncipe del castillo, el veneno fatal, el policía bueno… algo, algo que salve y lo salve a uno. Help! Dirían Los Beatles. Quiero ser John.

  5. Creo que el problema de los héroes es que depositan su confianza en una persona, una sola, cuando en realidad vivimos en sociedad y es necesario que todos colaboren, porque después ese héroe muere y todo es lo mismo. El héroe es una forma de no ser responsable peor además es una forma de presionar a ese quien lleva el título. Y bueno, como vos bien exponés, crea problemáticas muy fuertes, tanto que a veces no sé cómo analizarlas. A veces sólo podés quedarte con la boca abierta y una cosita en el pecho. Pero otras podés pensarlas y ser consciente de todo lo que implica el héroe.Muy lindo texto, muy ordenado.

  6. Hey rey… qué buena historia, aunque lamentablemente es un hecho con el cual se identifican varias personas que pasan por estas situaciones tan absurdas y que viven pensado que hubiese pasado con sus vidas de no cometer tal acto… Mano se espera la próxima, está cada vez mejor… sos grande!!!

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